Escribe: Raúl Diez Canseco Terry *

El Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú, liderado por su canciller, Javier González-Olaechea, lanzó hace unas semanas una iniciativa que todos aquellos con interés en integrar nuestro país en la senda de la libertad y el desarrollo deberíamos empezar a agendar y desarrollar: APEC Ciudadano.

La propuesta busca acercar a la sociedad civil los resultados prácticos de pertenecer a esta alianza de economías y demostrar el impacto que tiene en la ciudadanía el desarrollo de este tipo de actividades, que reunirá en el país a los representantes de los países más desarrollados del mundo.

La cuarta región natural del Perú, el mar, se convierte así en el escenario ideal para integrarnos al mundo. El expresidente Belaunde lo concibió de esa manera al desarrollar los puertos de Ilo en el sur y de Paita en el norte. La inauguración este año del puerto de Chancay no hace sino fortalecer nuestra presencia en el sudeste asiático, lo que constituye una excelente oportunidad para incrementar los flujos comerciales y de cooperación.

A ello debemos sumar la ampliación y modernización del puerto del Callao y las posibilidades serias que existen de desarrollar el megapuerto de Corío en Arequipa. La costa peruana empieza a tomar otro valor.

APEC Ciudadano debe mostrar a la gran mayoría de los peruanos los beneficios de pertenecer a bloques económicos como APEC. Por eso, saludamos el avance de la cancillería al haber logrado esta semana que el Perú sea “socio para el desarrollo” de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).

La ASEAN está conformada por 10 Estados y posee un mercado de más de 660 millones de consumidores con una economía de casi 4 billones de dólares. Somos el sexto país en el mundo, además de Alemania, Francia, Italia, Países Bajos y Chile, en obtener este estatus con tan importante bloque.

Nuestro objetivo macro es posicionar al Perú como un destino atractivo para las inversiones, el comercio, el turismo y los negocios. Pero a nivel micro, el foro debe mostrar de manera tangible las oportunidades de conexión, por ejemplo, que tienen las pymes con los mercados globales. Y de qué manera los jóvenes se insertan competitivamente en esa cadena.

En 2021, alrededor de 5,200 empresas peruanas exportaron bienes a la zona APEC por un monto total de USD 37,994 millones, mientras que nuestras importaciones desde APEC alcanzaron USD 30,479 millones. Gracias a los TLC con estas economías miembros de APEC, aproximadamente 1,500 pymes y 2,200 mipymes comercian de manera más eficiente con el Asia-Pacífico. Estos son los ejemplos que debemos mostrar a nuestros ciudadanos para fomentar el despegue de más iniciativas.

Las empresas peruanas deben realizar un esfuerzo mayor para formar cadenas de valor a nivel regional y global, impulsando la internacionalización de las pymes. Somos un pueblo emprendedor, abierto al mundo, que requiere unir toda la cadena de producción, como exitosamente se puede mostrar en agroexportación, textiles y turismo.

Desde la academia, por supuesto, estaremos poniendo nuestro granito de arena para ayudar a que los resultados de la APEC se multipliquen e irradien entre los jóvenes ávidos de integrarse competitivamente al mundo. La APEC se convierte así en la punta de lanza del desarrollo del Perú.

* Ex primer vicepresidente de la República.